El XXXIV Certamen de Malagueñas de Fiesta 2018 pasa sin pena ni gloria, aunque fue de menos a más. Después de unas inscripciones algo “caóticas” en cuanto a los grupos de baile, donde su organización dejó mucho que desear, aunque de todo se aprende, el certamen transcurrió con cierta normalidad.

Para empezar, un cambio en el lugar de celebración. Un lugar con un nombre complicado de recordar y que pocos dicen correctamente “Auditorio Parque de la Balsa de Decantación de Teatinos”. Un bonito enclave a mi parecer, que no contó con la afluencia de público que se esperaba. Quizás por estar situado en una zona con pocos vecinos cercanos, por estar algo alejado del centro o por no haberle dado la suficiente publicidad. Hay que recordar que en un principio el lugar elegido fue el auditorio de la Diputación Edgar Neville de calle Pacífico y así se dió a conocer durante varios días. Pero el horario no se adaptaba a los habituales del certamen. Este año tenía que ser en otro sitio a los clásicos Parque del Oeste o Eduardo Ocón por diversos motivos. El Parque de la Balsa de Decantación de Teatinos recordaba al recinto Eduardo Ocón, rodeado de jardines, gradas semicirculares, y por supuesto, al aire libre. A muchos no nos terminaba de convencer realizar el certamen en un recinto completamente cerrado. Pero bueno, hubiera sido otra experiencia más y no sabemos cuál hubiera sido el resultado.

En cuanto a lo anteriormente citado sobre los grupos de baile, pienso que se debería volver al sistema anterior, al que se ha realizado desde siempre hasta hace tres años. Y no es más que la designación de una persona que coordine y organice las designaciones de cada grupo con el intérprete. El sistema es muy sencillo. Las academias de grupos de baile se ofrecen para participar, una vez terminado el plazo de presentación de las composiciones se sortea qué grupo baila a quién, y luego, entre ellos, si así lo consideran, se intercambian las participaciones dependiendo de las necesidades de cada uno. Así fue y así debe ser, bajo mi opinión.

Todos sabemos las dificultades con las que se ha encontrado la Federación Malagueña de Peñas, Centros Culturales y Casa Regionales, este año para participar en la organización junto al departamento de Fiestas del Ayuntamiento de Málaga. A ese respecto no voy a evaluar, ya que no sería justo. Ha habido muchas “imperfecciones” y desajustes durante las semifinales, pero pienso que comprensibles, no así durante la Final, bajo mi opinión, impecable. Por lo que he podido hablar, el año que viene será otra cosa y volveremos a disfrutar de una organización como el certamen se merece en todas las fases, como siempre fue. Corramos un tupido velo y lo pasado, pasado está. Ahora toca seguir trabajando y mejorando.

25 han sido las composiciones presentadas este año. Un número casi normal si hacemos la media de participación de años anteriores. En la historia del certamen ha habido de todo, desde presentarse 12 0 13 composiciones solamente, a casi tener que ampliar los días en aquel 2015 con 41. La “pena” es que las 25 composiciones han sido realizadas por apenas 11 autores. Muy pocos. Si a tres de ellos se les hubiera ocurrido no participar, no hubiera podido celebrarse por falta de composiciones. El certamen de Malagueñas de Fiesta no puede ni debe estar “pendiente de un hilo, o de tres”. Y esto es, pienso, por motivos de promoción y divulgación. Al mismo tiempo creo que este certamen merece volver a tener la importancia de antaño. Aquí entramos ya en otra discusión que espero se trate próximamente por parte de los implicados, organizadores, academias y grupos de baile e intérpretes y autores.

La Gran Final de anoche en los jardines de Tabacalera fue todo un espectáculo digno de este gran certamen y de esta gran ciudad. Este es el segundo año que se realiza en este enclave. El año pasado no pude asistir y ya me comentaron que fue todo un acierto, cosa que pude comprobar en primera persona. La asistencia de público fue muy buena, la organización impecable, el escenario, sonido e iluminación excelentes a cargo de Espectáculos Mundo.

Quizás una cosa que objetar. Si pretendemos dar a todos los intérpretes, coros, grupos y solistas, la misma “ventaja” en cuanto a sonorización, vale. Si no, no entiendo cómo a algunos se les oía tan bien y a otros no tanto. Si hay un coro o un solista que no tiene tanta capacidad pulmonar o fuerza a la hora de cantar, no creo que hubiera costado tanto subir un poquito el fader de la mesa de mezclas. Fue mi impresión y la de varias de las personas con las que comentábamos este tema. Por lo demás muy bien. La orquesta dirigida por el maestro Javier Tapia sonó de lujo. Al César lo que es del César. Si la sonorización en algunos intérpretes dejó algo que desear, a los nueve músicos de la orquesta se les oyó muy bien. El sonido hace mucho pero la profesionalidad de los componentes de la orquesta y la magnífica dirección junto a unos muy buenos arreglos, hace que todo vaya sobre ruedas.

La presentación del certamen estuvo a cargo por José Luís Ramos “Pepelu”. Los años no perdonan y ya lo vemos presentar con gafas. Bienvenido al club maestro. Y maestro porque lo es. Creo que este certamen podría presentarlo tantos y tantos profesionales que tenemos en Málaga. Malagueños y malagueñas dignísimos para este fin. Pero permitidme ensalzar y realzar la labor de Pepelu, conocedor de la historia del certamen y de sus protagonistas, donde ofrece mil y una pinceladas de todo lo que corresponde a cada interpretación. Hasta nos da clases de historia malagueña. Qué más queremos. Magnífico. Gracias por tu implicación y buen hacer.

Recordamos los premios:

Primer premio a la composición: «Farolita marinera». Autor e intérprete Ginés González

Segundo premio a la composición: «Málaga, Niña, Madre y Abuela». Autores Dede Cortés y Sergio González. Intérprete Coro Rociero Ntra. Sra. de Gracia

Tercer premio a la composición: «Malagueña quiso Dios». Autor Juan Manuel Ortega. Intérprete Grupo Marengo

Premio Mejor Interpretación Solistas: Ginés González

Premio Mejor Interpretación Coros: Coro Rociero Ntra. Sra. de Gracia

Balance positivo, mejor de lo que esperaba teniendo en cuenta las dificultades iniciales.

(P.D. Algunos echamos de menos la participación en la Final de la ganadora del año pasado Mary Carmona. Tomen nota, por favor, para posteriores ediciones. Ai igual que también se echó de menos alguna malagueña por parte de la artista invitada Lidia Gómez, ganadora de tres ediciones)